lunes, 17 de marzo de 2014

Última primera vez

Después de años compartiendo silencios, 
cigarrillos, canciones, lápices y cama, 
me preguntaste qué lado prefería. 
Y no es que el derecho te siente mejor. 

Ni que me sienta protegida 
si estás tú cerca de la puerta. 
No es el sitio de tu padre. 
Ni el pudor. Ni la conciencia.
 
Es que tocarte desnuda 
y verte a contraluz
es tapar la luna con los dedos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario